El Château Miraval y su icónico rosado acaban de ser votados como el "Vino Rosado de Provenza más deseado del mundo" en un nuevo ranking de las 33 viñas más deseadas de Provenza realizado por la revista Le Figaro Magazine de Francia (edición francesa, publicado el 19 de mayo). Para esta primera clasificación completamente inédita, centrada exclusivamente en el atractivo de los vinos de las fincas de Provenza, Le Figaro Magazine consideró todos los criterios que han contribuido a que esta región vitivinícola sea un éxito mundial. Provenza es una región altamente apreciada en todos los sentidos. En otras palabras, es una región en la que los consumidores sueñan, ya sea en Francia o al otro lado del planeta. Por lo tanto, el ranking incluyó las tres denominaciones de origen de los vinos de Provenza (Côtes de Provence, Coteaux Varois en Provence, Coteaux d'Aix-en-Provence), la AOC de Bandol, Les Baux de Provence y también Lubéron.
Las fincas fueron evaluadas según los siguientes ocho criterios: el paisaje (doble puntuación), ya que se valora principalmente el "efecto postal"; las instalaciones y su renovación; en qué medida el lugar es un tesoro escondido; el renombre de los propietarios; el diseño de las botellas; si se emplea una agricultura sostenible; la visibilidad de la finca (en Francia y en el extranjero) y, por supuesto, la calidad del vino que el equipo de Figaro Vin degustó. Este último factor puede ser el último en la lista, pero es el más esencial (triple puntuación). Las puntuaciones se calculan en función de la puntuación promedio otorgada en los últimos tres años por el equipo de cata de vinos.
SOBRE MIRAVAL
Verdadero ícono dedicado a las Artes, Miraval no cesa en su búsqueda de la maestría en el arte de la creación y el arte de la artesanía. Cada creación nacida de la pasión por trabajar las vides resulta en una obra maestra inesperada, elevando cada vez más las cualidades de un gran rosado. Inspirado por el color, la materia y la luz, Miraval reinventa los códigos y las formas de apreciar el rosado.
El Arte del Rosado en Miraval se convierte en "Art de Vivre".
